CAPITULO III - El TRIATLÓN EXTASICO
Sigue el calor del encuentro de los ritmos, dejas de lado tus potenciales ganas de seguir estremeciendo explosivamente mis aberturas, comienzo a dominarte lentamente, velozmente traslado tu cuerpo de espaldas a una cama, dejándote suspirar mientras puedas, si logras dominarlo... y en un breve y fugaz retozo, acaricio con solo usar la punta de mi despiadada lengua tu glande, morbosamente lo humedezco, comienza el frenesí, lo succiono de forma intensa pero suave, lo sumerjo dentro de mi garganta hasta casi asfixiarlo de humedad y roce, y en un débil momento, ya plagado de suficiente turgencia lo suelto, me viro en la posición que mas espero disfrutarlo, te arrastro sobre mi a espaldas y de cubito dorsal y de manera sigilosa y profundamente excitada, lo introduzco por mi ano, tratando de no desconcentrarme de tanto placer y éxtasis juntos. comienzas de nuevo con tus movimientos intensos, con tu morbosa coreografía, con tus vaivenes prohibidos,... me posees en extrema fisión, expandes mi ya saturado clítoris con tanta lujuria desatada...
Luego de momentos de tanta calidez. , solo logras escuchar entre gritos y gemidos auténticos de tal sensación, escaparse tu nombre, repetirse mil veces, fundirse con mi respiración, que ya esta ligada a la tuya... y en breves y eternos instantes te desbocas sobre mí... te derramas muy profundo y muy intenso... después de tal efecto consigues evadirme y te retiras de sobre mi, esperas recobrar energías, sueñas con seguir, recargarte un poco y destrozarme de pasión... Solo que no existe reposo permitido entre tal conmoción, y aprovecho para besar cada una de tus pecas, cada uno de tus vellos impúdicos, cada una de tus zonas ocultas, de humedecer cálidamente cada uno de tus poros...
Sigue perseverante y cabal la invasión del incienso sobre la atmósfera entre los dos, silenciosa y cruel espera tranquila un tarrito de miel su plena actuación... el jengibre esta en tregua... y tomo suavemente el lienzo que tengo a mi lado y con la miel comienzo a dibujar sobre ti formas desconocidas y medievales, luego en un arranque de frenesí mi lengua devora toda la miel y deglute todos tus fluidos de manera extasiante y posesa...
Regresa tu cruel respiración sobre mi humanidad y liberas a un ya casi derretido jengibre loco por ser derramado y consumido sobre mis partes, liberas todas mis cortinas, cómplicemente todas ellas se abren, te muestran todo lo que nadie ha conseguido humedecer con la boca, y aprovecha tu desafiante lengua para acceder a ellas, te elevas sobre mi vagina violentamente, ya nada impide el contacto extremo, y dibuja tu lengua mil formas runicas o japonesas ya ni se, y vas desplazándola de manera sutil y jugosa, resistiendo los embates de mis contorsiones, de mis contracciones, resulta demasiado erótico detenerte, y eliminas para siempre mis cortinas, tu lengua las vuelve añicos, me causas demasiado placer, grito, grito a mas no poder, grito tu nombre casi in entendible por tanta emoción, y succionas todas mis humedades, te disuelves en ellas...
Casi muda de tanto placer decides de nuevo tomarme, lo haces de manera firme abres mis piernas alcanzando grados tan extraños de amplitud y decides cabalgar encima de mí, ya deshecha de humanidad, logras penetrarme de forma brutal pero sublime, me arrastras al borde de la demencia, te expandes de manera desorbitada, mientras me miras el rostro, ahora eres tu quien gime mi nombre, tus sudores casi bloquean los temblores que percibo, aunque ya no se si son tuyos o míos, ubicas exactamente el punto de mas presión de mas placer y antes de que puedas advertirlo yo ya me derramo en un intenso orgasmo, y tu fiel a eso decides hacerlo también...
Tratan de descansar del tal Triatlón extasico tus ganas...
Lo haces mientras puedes... mientras me dejas respirar de nuevo oxigeno y no tu aroma y respiración, milagrosa paz invade nuestras almas y me aferro a ti, pues siento se me escapa la vida en tan dichoso instante...
Trata de imaginar si puedes lo que sigue...
Tu Socia
Ya intimidada...
Luego de momentos de tanta calidez. , solo logras escuchar entre gritos y gemidos auténticos de tal sensación, escaparse tu nombre, repetirse mil veces, fundirse con mi respiración, que ya esta ligada a la tuya... y en breves y eternos instantes te desbocas sobre mí... te derramas muy profundo y muy intenso... después de tal efecto consigues evadirme y te retiras de sobre mi, esperas recobrar energías, sueñas con seguir, recargarte un poco y destrozarme de pasión... Solo que no existe reposo permitido entre tal conmoción, y aprovecho para besar cada una de tus pecas, cada uno de tus vellos impúdicos, cada una de tus zonas ocultas, de humedecer cálidamente cada uno de tus poros...
Sigue perseverante y cabal la invasión del incienso sobre la atmósfera entre los dos, silenciosa y cruel espera tranquila un tarrito de miel su plena actuación... el jengibre esta en tregua... y tomo suavemente el lienzo que tengo a mi lado y con la miel comienzo a dibujar sobre ti formas desconocidas y medievales, luego en un arranque de frenesí mi lengua devora toda la miel y deglute todos tus fluidos de manera extasiante y posesa...
Regresa tu cruel respiración sobre mi humanidad y liberas a un ya casi derretido jengibre loco por ser derramado y consumido sobre mis partes, liberas todas mis cortinas, cómplicemente todas ellas se abren, te muestran todo lo que nadie ha conseguido humedecer con la boca, y aprovecha tu desafiante lengua para acceder a ellas, te elevas sobre mi vagina violentamente, ya nada impide el contacto extremo, y dibuja tu lengua mil formas runicas o japonesas ya ni se, y vas desplazándola de manera sutil y jugosa, resistiendo los embates de mis contorsiones, de mis contracciones, resulta demasiado erótico detenerte, y eliminas para siempre mis cortinas, tu lengua las vuelve añicos, me causas demasiado placer, grito, grito a mas no poder, grito tu nombre casi in entendible por tanta emoción, y succionas todas mis humedades, te disuelves en ellas...
Casi muda de tanto placer decides de nuevo tomarme, lo haces de manera firme abres mis piernas alcanzando grados tan extraños de amplitud y decides cabalgar encima de mí, ya deshecha de humanidad, logras penetrarme de forma brutal pero sublime, me arrastras al borde de la demencia, te expandes de manera desorbitada, mientras me miras el rostro, ahora eres tu quien gime mi nombre, tus sudores casi bloquean los temblores que percibo, aunque ya no se si son tuyos o míos, ubicas exactamente el punto de mas presión de mas placer y antes de que puedas advertirlo yo ya me derramo en un intenso orgasmo, y tu fiel a eso decides hacerlo también...
Tratan de descansar del tal Triatlón extasico tus ganas...
Lo haces mientras puedes... mientras me dejas respirar de nuevo oxigeno y no tu aroma y respiración, milagrosa paz invade nuestras almas y me aferro a ti, pues siento se me escapa la vida en tan dichoso instante...
Trata de imaginar si puedes lo que sigue...
Tu Socia
Ya intimidada...
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